PINCELADA POR CAPÍTULO
A la mañana del segundo día en el desierto el piloto se
despierta al sonido de una voz infantil. Un niño vestido con una ropa extraña
le solicita un dibujo de un cordero. A pesar de lo extraño de la situación, el
piloto accede y después de varios intentos da con la representación perfecta de
lo que le pide el Principito: una caja en la que se contiene un cordero oculto
en ella. El Principito empieza a parecernos en este momento la materialización
del piloto de niño.
Capítulo II
La primer noche me
dormí entonces sobre la arena, a mil millas de cualquier lugar habitado. Estaba
realmente más aislado que un náufrago sobre una balsa en medio del océano. Se
imaginan entonces mi sorpresa, al amanecer, cuando una extraña vocecita me despertó.
Decía:
- Por favor... dibújame
un cordero !
- Eh!
- Dibújame un
cordero...
No hay comentarios:
Publicar un comentario